He comenzado a resguardarme de lo que pasa día a día, creo estar más tranquiliza y es extraña la sensación de estarse dando cuenta de los demás mientras avanzo en este tema de ya no pasar por tantas alteraciones del ánimo. Por ello:
y nos fuimos convirtiendo
en un batallón
dedicado a aprender
trucos para entretener
a la gente.
Juntamos imágenes
a la intemperie,
las hemos transformado
en láminas de álbum.
Elegimos puentes,
juntamos trozos
de ritmos de moda:
como el calipso,
en su tiempo.
Guardamos esas ideas,
intercalándolas con otras,
he escuchado hasta decir:
¡eso es un collage!
Corregiría:
son errores
formas hechas desde el azar,
y bastan para obtener admiración.
¿Cuántas veces los cerros
se nos han venido encima?
Sin lograr controlar el vaivén
producido por nuestros esfuerzos.
¡Dulce compañerito!
¡Mira como nos va a golpear el viento!,
los ojos del escuadrón alineado,
quedarán tiznados de polvo
y trocitos de pasto.
¿Nos esconderemos en la primera casa salmón
que encontremos?
Si poh, cambiemos
que nos interesen ahora las habitaciones.
Cerquemos el campo
de recolección.
Actuaremos
en funciones reducidas
ilusionando con lo que hemos
ido controlando.
¡Asegúrate, ejemplo
de preocupación por el grupo!
lider, poco preparado,
quizá puedas conducirnos a tiempo,
para retomar un día de estos
todo lo aprendido
para controlar cursos de miradas
y hasta creernos encantadores de serpientes.
aseguro
una escapada,
nos iremos
lejos.
Allá donde no hay forma
de corregir los dedos
ya no nos harán caso
y seguiran ritmos simples.
Por la habilidad odiaría
esa conjunción de realidad,
nos dejaría
aquietándonos,
carcomidos
de tanto show atrasado.
Esperemos,
¿con continuidad en el entrenamiento?
buscando miradas extraviadas
para soportar nuestros nuevos
descubrimientos.
te haremos saber querido dueño,
¡desecharemos seguir
recreando lo efímero!,
y ya no podremos nunca más
encantar a quienes
entrenas para ello,
es que nunca crees en nosotros
tú nos golpeas
haciendo aparecer los hilos
al público,
nos dominas,
sigues esperando
por más avances
y así vernos siempre derrotados.
Sí,
sí,
vamos a ganar en destreza
tenemos claro:
1.- caminar sin prisa,
2.- sólo hacer recolecciones nocturnas,
eso prepara nuestra capacidad
para sorprender
para enorpecer lo bastante
y para acumular
necesidad.
¡Necesidad de nosotros a los demás!
esos que dices
¡huyen y observan por el rabillo!,
cuando como rarezas,
llegamos al sitio eriazo
dejado en la ciudad
para entregar la ilusión
de que los trozos
un día,
un día se unían.
3 comentarios:
¿te estás dando cuenta de los demás? Cuando uno está dentro de tu casa cree estar dentro de una naranja. Me gustan tus gajos y el sabor de tus jugos.
Siento que estoy siendo un poco apuñalado, sólo un poco. ya te diré cuando siento que gritas y cuando siento que susurras. El problema es que siempre puedo estar equivocado.
Un beso.
hola
donde estás?
:( te extraño
un beso
Naty
Comenzar como batallón sin duda parece la fuerza del inicio de la historia, que es un collage. Nos armamos de albumes y nos quedamos con una colección de albumes.
En el transcurso se aburrieron y el batallón mutó a una compañía de teatro con público reducido. para no perder la costumbre o la rutina.
El dueño pone a prueba y siempre está más adelante para ver la derrota, finalmente siempre tendrá esclavos para domesticar.
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